sábado, 12 de mayo de 2007

postheadericon Crónica de una graduación anunciada

Todos los augurios lo pronosticaban. Finalmente ayer nos graduamos, I Promoción. Nervios a flor de piel, algunas lágrimas y también (por qué mentir), llanto descontrolado en algún que otro momento. Alegría general y zapatos de tacón, besos, abrazos, Gaudeamus, elegantes trajes de chaqueta y discursos. No pudimos controlar nuestra sonrisa en toda la noche.

Mejores momentos:

  • El ensayo previo: ambiente más relajado y distendido, aunque era inminente aún lo tomábamos a risa.
  • El discurso de Carlos: no tengo palabras. El momento más emotivo y brillante que recuerdo en mucho tiempo.
  • La espera antes de la cena. Cuando la gente ya se había marchado de la Universidad, y quedábamos sólo unos pocos.
  • Descubrir que quieres a alguien más de lo que crees. Especiales sorpresas: Clara, Leo, Vanessa, Roberto, Ángel Soria, Miriam, Juana, Sandra, Fernando y, especialmente Carlos.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Jajajaa me ha encantado aunque salgo poco jooo pero muy bueno un saludo de Angel by linkin

Anónimo dijo...

Eres un sol!

Ángel dijo...

Estás hecha una artista, delegada.

No sé si tanto como yo y mi pajarita retropostmo (Leo dixit), pero en cualquier caso, quedan patentes en la presentación tus conocimientos sobre la estructura y organización de la diócesis.

Miguel Ángel Hernández dijo...

Enhorabuena. Para qué decir más.

Ernesto Castro dijo...

El mejor de todos ángel, que con una pajarita a lo Andrés Montes, con su botella de sprite en la mano y esa pose encorvada parece dos cosas:
1)un gigolo de los años 20
2)el cantante de I´m singing in the rain de retirada

Anónimo dijo...

!Qué bonito¡ !!Felicidades GINGER¡¡

Lena yau dijo...

Qué mona vas!

Felicidades, Ginger!

Mucho éxito en aquello que emprendas!

besitos

Ángel dijo...

Gracias (?), Taun. Lo de la pajarita es una larga y bonita historia que voy a contar en mi blog el día que menos te lo esperes.

No sé con qué opción quedarme de las dos que planteas. Si bien siempre he querido ser un gigoló de los años 20, me seduce la idea de parecerme a un Gene Kelly otoñal y maduro.

Por cierto, no sé qué llevaría en la mano, pero no probé el Sprite en toda la noche. ¿Qué clase de vicioso crees que soy?